Sin ánimo de valorar el ineficiente trazado e instalación de los nuevos carriles bici, lo único que los ciudadanos de Rivas podemos esperar para encontrar sentido a tan nefasta planificación, es que se ofrezca un servicio de transporte acorde a las expectativas municipales de ecología, movilidad y sostenibilidad.
Como ya hace tiempo hacen en otras ciudades como Badajoz, Huesca o Toulouse en Francia, se debe implementar un servicio de microbuses eléctricos y gratuitos que faciliten la movilidad entre las principales áreas de nuestra querida ciudad, facilitando a adolescentes y adultos el transporte sin necesitar usar el ya odiado vehículo privado. De esta forma realmente se incentivaría el desuso del coche en favor del transporte colectivo, y dando cobertura a toda la población, ya que no todo el mundo puede usar el carril bici, con lo que ya representa una discriminación en sí mismo al darle tanto protagonismo.